¿Qué es la Estimulación Temprana en Cachorros?
La estimulación temprana consiste en una serie de ejercicios simples que exponen a los cachorros a niveles muy bajos de estrés. Esto activa su sistema nervioso, hormonal, pituitario y suprarrenal. Como resultado, los cachorros desarrollan conductas exploratorias más rápidamente, lo que les hace sentirse más seguros y, en general, más valientes.
¿Para qué sirve la estimulación temprana en cachorros?
La estimulación temprana en cachorros, conocida como ENS (Early Neurological Stimulation) en inglés, fue desarrollada por el ejército de Estados Unidos para crear los llamados “Super Dogs”. Tras años de investigación, identificaron cinco ejercicios de estimulación neurológica temprana que ayudan a los cachorros a ser más seguros de sí mismos y de su entorno. Estos ejercicios también fomentan que los perros sean más alertas, con mayor deseo de aprender, mejor tolerancia al estrés y, como resultado, mejoras en su desarrollo cardiovascular y en su sistema inmunológico.
¿Qué ejercicios forman parte del programa de Estimulación Temprana?
Antes de describir los ejercicios, es crucial mencionar que no se debe exceder ni en repeticiones ni en duración. Exponer a los cachorros a demasiado estrés puede ser contraproducente, haciendo que se estresen más fácilmente en lugar de volverse más tolerantes a diversas situaciones. Estos ejercicios se realizan desde el tercer hasta el decimosexto día de vida, una vez al día y no más de 5 segundos por ejercicio.
- Estimulación táctil
- Mantener la cabeza erguida
- Colocar la cabeza hacia abajo
- Posición supina
- Estimulación térmica
Estimulación Táctil Se trata de activar la sensibilidad en las patas del cachorro. Para ello, se utiliza un bastoncillo de algodón que se pasa entre las almohadillas de una o varias patas.
Sostener la cabeza erguida Sujeta al cachorro por los hombros de manera segura, de modo que su cabeza quede por encima y su cuerpo por debajo de tus manos.
Posicionar con la cabeza hacia abajo En esta posición, la cabeza del cachorro apunta hacia el suelo. Al principio, puede que el cachorro se mueva inquieto, pero sujétalo con firmeza durante 2 o 3 segundos. Con el tiempo, podrás mantenerlo hasta 5 segundos sin causarle demasiado estrés.
Posición supina Coloca al cachorro boca arriba. Al igual que en la posición anterior, si el cachorro se mueve mucho al principio, no es necesario mantenerlo en esta posición durante los 5 segundos completos. La idea es acostumbrarlo gradualmente a un nivel mínimo de estrés saludable.
Estimulación térmica Pon al cachorro sobre una toalla húmeda con agua fría (bien escurrida) o utiliza una bolsa de guisantes congelados envuelta en una toalla durante 5 segundos.
¿Es suficiente la estimulación temprana?
La estimulación temprana concluye aproximadamente cuando los cachorros abren completamente sus ojos y oídos. A partir de ese momento, es esencial introducir otras formas de estimulación, como la auditiva, visual y olfativa.
Es crucial exponer a los cachorros progresivamente a diferentes estímulos desde que comienzan a abrir los ojos y oídos. Por ejemplo, puedes reproducir sonidos de tormentas, fuegos artificiales, disparos, sirenas y ruidos de la ciudad.
Otra manera de aumentar su seguridad en el entorno es presentarles objetos de diversas formas. Durante las primeras semanas, cuando aún están en el interior, es el momento de introducir juguetes de diferentes tamaños y texturas. Una vez que comienzan a salir al exterior, lo ideal es colocar en su área de juego objetos que puedan encontrar en su vida diaria, como bolsas de basura llenas o una bicicleta. Asegúrate de que estos objetos sean seguros y no representen un peligro para los cachorros. Cada día, introduce un objeto nuevo en un lugar diferente para que lo descubran.
Esto ayudará a que, cuando estén en entornos conocidos como la calle o el parque, no se asusten si aparecen cosas nuevas. Otra forma de estimular a los cachorros es proporcionarles superficies inestables sobre las que puedan subirse sin peligro, como una tabla de equilibrio de yoga, un cojín de pilates o un monopatín. Esto les ayudará a tener mayor control sobre su cuerpo y, en consecuencia, sobre su entorno.
Finalmente, la estimulación olfativa también es importante. Puedes utilizar una alfombra de olfato o darles parte de su comida en el suelo y con la luz apagada en lugar de en comederos.
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Bibliografía
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